El sacerdote jesuita, Gerardo Rosales enseña que lo que dice la Biblia acerca de los tiempos difíciles. Mencionó la parábola del trigo y la cizaña. “Estos deben crecer juntos para que cuando llegue el tiempo de la cosecha se pueda recoger el buen trigo y desechar la cizaña. Esto nos enseña a tener paciencia”.
También contó la parábola del sembrador, donde unos granos cayeron en piedras, otros entre espinos, pero unas semillas cayeron en tierra buena y dieron mucho fruto. “Hay que cuidar lo que hacemos y comprometernos con aquello que hacemos y soñamos”.
Explicó que “para sacar este país adelante debemos cuidar aquello que hacemos. Es una esperanza activa para alcanzar los frutos. Soñamos con un país de progreso, de paz, de libertad”.